Las Historias de Ibrahim

El camino hacia la paz


En la actualidad, nuestro planeta se encuentra amenazado y cercado por las guerras, los conflictos, la contaminación atmosférica, el calentamiento global, la contaminación de los mares y ríos, el hambre, la violencia, las adicciones, la delincuencia, el desempleo, la carestía de la vida y el constante deterioro de los valores morales, entre otras cosas.

Solo hace falta observar, para comprobar que todo esto se encuentra al alcance de nuestras emociones y percepciones.

Paralelamente, y como una corriente contraria que empuja generando resistencia a tanta oscuridad, encontramos muchas otras preocupaciones e inquietudes, tales como la paz, la satisfacción, la ecología, la justicia, la tolerancia, el diálogo, el equilibrio, el crecimiento, la felicidad y el amor, como fuentes generadoras de todo lo demás.

Dicho de otra manera, en un mundo de dualidades… somos juez y parte en la batalla existente entre el bien y el mal.

Ahora, mi pregunta es… ¿Quién nos protege, si quienes deben tratar de resolver estas cuestiones tienden a hacerlo buscando nuevas formas de conquistar y controlar la naturaleza y toda expresión de vida existente en el planeta? ¿Quién nos juzga, si nadie escapa a la corrupción, a los negociados, a los "motivos ulteriores"? ¿Dónde se encuentran los pilares para recuperar nuestros valores, si los medios de comunicación propagan y endiosan de manera escandalosa, materiales obscenos y violentos?

Todas las religiones conocidas, como así también el humanismo, la moral y las nuevas corrientes ideológicas, prescriben el amor, la compasión, la tolerancia y el perdón, como la fórmula perfecta para el gran cambio.

Bien, pero desde el lugar que ocupamos… sea el que fuere… ¿nos detenemos a pensar en el alcance de estos conceptos y el lugar que ocupan en nuestras vidas? Y merced a esta respuesta… ¿nos alcanza con analizarlos una vez, o vale la pena que hagamos un esfuerzo mayor, y tratemos de encuadrar sus significados en los diversos contextos y circunstancias que nos toca vivir?

AMOR
El amor es la fuerza que da vida al universo y por ende, es el elemento esencial de toda persona. El amor es la luz más radiante que podamos ver, y a la vez, es ese gran poder que puede resistir y vencer cualquier fuerza. Hay quienes dirían que el amor es aquello que eleva a cada alma hacia la eternidad. El amor es la manera más directa de llegar al corazón de una persona.

COMPASION
¿Y la compasión? ¿Qué es cuando todo habla de, y promete compasión?

La compasión es el movimiento del alma que nos vuelve sensibles al mal que padecen otros seres. La compasión describe la comprensión del estado emocional de otro, lo que no implica empatía. La compasión va combinada, frecuentemente, de un gran deseo por aliviar o reducir el sufrimiento ajeno; pero también va asociada a la idea de compartir. Desgraciadamente, este sentimiento suele ser asociado a un sentimiento pasivo de lástima o pena. Sin embargo, la solidaridad, como positiva actitud de generosidad y cuidado de los demás, resulta psicológicamente incomprensible, sin el motivo de la compasión. Mostrar compasión a todo ser viviente es un requisito del ser humano.

EL PERDON
Perdonar es también una gran virtud. Perdonar implica reconciliarnos o "reencontrarnos" con nosotros mismos; implica restitución y regreso a la esencia.

¿Quién no recuerda las palabras de Jesús, diciendo a la muchedumbre sedienta de sangre: "El que este libre de pecado, que tire la primera piedra"? Si entendemos esto ¿cómo podemos "lapidar" a otros con nuestras condenas?

Nunca deberíamos olvidar que, cada uno hace lo mejor que puede con lo mejor que tiene, y que nosotros no somos quienes para interferir en sus decisiones personales ni en su libre albedrío. Podremos no compartir criterios, ni modos, ni caminos, ni acciones… pero lo que no debemos hacer es, interferir en los destinos personales de los demás. Fueron la maldad y el odio los que convirtieron a la tierra en el abismo del infierno. Los excesos de aquellos que no conocieron la misericordia, o tolerancia, hicieron de los siglos anteriores, los peores de todos.
Por eso, el mejor regalo que podemos hacer, es el enseñar a las nuevas generaciones el perdón y la tolerancia.

Deberíamos ignorar las faltas de los demás, respetar las diferentes ideas y perdonar lo que es perdonable. ¿Y por qué? Porque este mundo es el único espacio que tenemos para albergar la diversidad. Y porque el rencor es un veneno que va consumiéndonos por dentro.

LA TOLERANCIA
La tolerancia es aquel elemento primordial que integra -junto con otros-, los sistemas morales y una importantísima fuente de disciplina y virtud espiritual.

Nosotros esperamos amor, respeto, tolerancia, misericordia, libertad y afecto. Pero, ¿Podemos esperar esto si no ofrecemos primero lo mismo a los demás?

Aquellos que quieren reformar al mundo deben primero reformarse a sí mismos, purificar sus mundos internos de odio, rencor, celos y adornarlos con virtud.

Ya lo dijo Gandhi: "Se tu mismo el cambio que deseas ver en los demás"

Aquellos que carecen de autocontrol, autodisciplina y sentimientos puros, pueden parecer atractivos al principio. Sin embargo, lo que ellos inspiran en otros, desaparece rápidamente.

La bondad, la belleza, la veracidad y la virtuosidad son la esencia del mundo y la humanidad. Ocurra lo que ocurra, el mundo un día encontrará esta esencia y nadie podrá evitarlo.

¿Cómo podemos empezar a buscarla? Como dice el sabio refranero popular: "A grandes males, grandes remedios". La ciencia lo explica de otro modo, utilizando la Ley de los opuestos: "A cada acción se opone, una reacción de igual intensidad pero de sentido contrario" (Ley de causa y efecto). Esto es, a grandes negatividades, grandes soluciones.

El odio y el amor (como todos los opuestos) están juntos, y sólo existe entre ellos una pequeña línea divisoria. Del amor al odio existe un solo paso, por eso el cantante no está equivocado al decir que "tan sólo se odia lo querido"…

De esa forma las negatividades de nuestro país y nuestro planeta, podrían trasmutarse. La fuerza de los problemas, podría ser la misma fuerza que la que propicie las soluciones.

Somos responsables, ante las generaciones futuras, del mundo que dejemos. Por eso debemos cambiar, o tratar de cambiar positivamente.

Séneca nos dio la clave: "Vive con los hombres como si Dios te mirase; habla con Dios, como si los hombres te oyesen".



FRASES DE MAHATMA GANDHI

1. "El verdadero progreso social no consiste en aumentar las necesidades, sino en reducirlas voluntariamente; pero para eso hace falta ser humildes"

2. "La pureza de los medios debe ser igual a la pureza del fin"

3. "La verdad es totalmente interior. No hay que buscarla fuera de nosotros ni querer realizarla luchando con violencia con enemigos exteriores"

4. "Todo derecho que no lleve consigo un deber, no merece que se luche por defenderlo"

5. "No me gusta la palabra tolerancia, pero no encuentro otra mejor. El amor empuja a tener, hacia la fe de los demás el mismo respeto que se tiene por la propia"

6. "El amor y la verdad están tan unidos que es prácticamente imposible separarlos; son como las dos caras de la misma moneda. El amor es el medio, la verdad es el fin; si utilizamos el medio, tarde o temprano llegaremos al fin, a la Verdad, a Dios"

7. "La no-violencia es la más alta calidad del corazón. La riqueza no sirve para conseguirla, la cólera la desvía, el orgullo la devora, la gula y la lujuria la oscurecen, la justicia la vacía, toda prisa injustificada la compromete"

8. "Nunca es bueno el amor a los otros, cuando es exclusivo y con excepciones. El verdadero amor es sincero y desinteresado"